"Ha iniciado ya el vuelo del Cóndor"
Fotografías Ruta Sur
JPD2016 Ruta Sur Artículo #1
23 de Mayo de 2016
Las Heras, Provincia de Santa Cruz, Argentina
"Ha iniciado ya el vuelo del Cóndor"
Ha iniciado ya el vuelo del Cóndor y bajo sus alas la Ruta Sur de la séptima carrera continental ceremonial de los Pueblos Originarios se inició el 6 de mayo de 2016 con la Luna Nueva en Ushuaia, antiguo territorio de los pueblos Yagán, Shelknam, Kaweskar, Haush y Mapuches, hoy conocido como Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, de Argentina y Chilena donde los límites políticos se diluyen en las montañas tras las huellas del Guanaco y del Choique.
Durante 4 días estuvo prendido el fuego sagrado, dirigiendo la realización de dos ceremonias de inicio de la carrera: la celebración del día de la Chakana, dirigida por el mayor Evaristo Futuri, así como una carrera inicial desde dos flechas, Playa Larga y el sitio de descanso del hermano Nahui Mazatl, Francisco Melo, desde el círculo ceremonial de las Jornadas de Paz y Dignidad que se encuentra frente a la Bahía de Ushuaia, con el propósito de iniciar con gran fuerza la carrera de las semillas.
Durante la ceremonia de inicio de la carrera continental estuvieron presentes hermanas y hermanos Yaganes, Selknam, Kaweskar, Haush, Mapuches, Quilmes, Qoyas, Tayronas; las organizaciones Centro Tupak Amaru, Ayllu Hijos del Cóndor, Academia de la Lengua Quechua, Red Cantoalagua, Fundacion Carare y todas las familias que apoyan la realización de la carrera en Ushuaia y en la región de Tierra de Fuego.
Cinco jornadas de carrera transitaron los antiguos caminos de la Isla entre Ushuaia, Tolhuin, Río Grande, San Sebastián y Porvenir, visitando a las comunidades que desde hace muchos años corren y que en este tiempo también están presentes honrando la Semilla Originaria, elevando Corazones, Espìritus, Bastones, Instrumentos Sagrados, Cantos, Danzas, Rezos y Palabra por la integridad del pasado, presente y futuro, por los pueblos, por los animales y la inmensa naturaleza que va más allá del horizonte que se lleva profundamente en el corazón.
Cruzamos el estrecho de Magallanes para llegar a tierra firme, al continente de Abya Yala o América, y allí el espíritu del Cóndor se posó en la tierra de nuestros hermanos mapuches y kaweskar, quienes elevaron también su Sagrada Energía y por los caminos de la cabeza de la Patagonia fuimos corriendo con el corazón exaltado desde San Gregorio, Río Gallegos, la Esperanza, el Calafate, Tres Lagos, Gobernador Gregores, Bajo Caracoles, Perito Moreno y las Heras, cumpliendo así hasta el día de hoy 1780 kms en diesiciete Jornadas de Paz y Dignidad, culminando en una ceremonia de la luna llena tras un atardecer de ARCOIRIS.
En el camino hemos podido recoger semillas de canelo, notro, calafate, yanten, chocho magallánico, mata negra, caléndulas, y flores, y también conocer los alimentos y medicinas propias de cada región, que nos dan la posibilidad de seguir corriendo juntos, tejiendo el círculo de la vida, honrando la semilla vegetal, animal, mineral, humana y cósmica.
Agradecemos profundamente a las autoridades tradicionales, funcionarios municipales, provinciales y nacionales del gobierno argentino y chileno, maestras y profesores, niñas y niños de escuelas rurales, gente del campo y las ciudades, scouts, militares, periodistas, deportistas, abuelas, abuelos, familias, comunidades, organizaciones y entidades, que han corrido con amor y certeza entre la estepa patagónica, por montañas, valles, lagunas, neblina, lluvia, nieve, sol, brisa, piedras, estrellas, frío y calor, acompañados y honrados por la presencia de la familia de los animales, de los guanacos, choiques, zorros, conejos y seres de la tierra, el agua, el fuego y el aire, y seres del tiempo y del universo.
Gracias por tejer juntos la ruta sur desde el corazón, unidos por el compromiso de proteger la vida, la memoria de los antepasados, la dignidad de los presentes y la semilla del futuro. Por eso hacemos un llamado a toda la familia de la humanidad para que sigamos corriendo juntos en este tiempo más allá de las fronteras políticas porque nos une el territorio, la memoria ancestral, la vida en todas sus formas y el espíritu de las jornadas de paz y dignidad.
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